Visitando Breslavia

¡Buenos días, winteros!

Siento la ausencia por estos lares pero es que he estado en mi queridísima tierra y entre que no llevaba el ordenador y que apenas pasaba por casa, no he dado señales de vida por aquí. Yo ya estoy de vuelta a la rutina y no me apetece nada ¿vosotros estáis igual?

Pero bueno, para animar un poco el día, vamos a viajar a Polonia, más concretamente a Breslavia. Allí estuve un día y dos noches para luego ir a Málaga. Aunque no visité todo lo que me hubiera gustado, sí que hice mogollón de fotos y fui muy feliz. Sin embargo, voy a dividirlas en dos entradas porque editando las fotos me he dado cuenta que tengo demasiadas y aburriría un pelín tanta foto ¡Ah! Y por si queréis imaginaros un poco mejor mi día allí, poned la nueva canción de The Chainsmokers ft. Coldplay Something just like this. ¿Preparados?

Breslavia es conocida también por la cantidad de puentes y canales que tiene, de hecho, se le llama la Venecia del norte y le hice fotos a todos los puentes por los que pasé pero pondré solo las fotos que más me gustan.

Esas dos torres pertenecen a la Catedral católica de Breslavia, llamada Juan Bautista.

Si hubiese tenido más tiempo y dinero no me hubiera importado almorzar en ese restaurante. Además el tiempo invitaba a quedarse.

Otro puente que me gustó mucho y que da a un parque infantil.

Otra cosa que me encantó de allí fue el empedrado que tienen las calles y lo rústico que es.

Metro no tendrá pero el tranvía es la mar de cómodo para moverse de un sitio a otro. Eso sí, no llegué a pillarle el truco al transporte público.

Antes de viajar hacia allá, ya tenía claro que uno de los lugares que iba a visitar [a parte de la catedral] era el puente de los candados de allí. Me quedé con mil ganas de ver el de París y por eso estaba empeñada en visitar este. Me tiré 10 minutos haciéndole fotos.

Otra característica de esta ciudad es que tiene muchísimas iglesias ya que es muy católica. De hecho, el papa Juan Pablo II era polaco [aunque no sé en qué ciudad nació].

Aunque también tiene unos cuantos lugares ajardinados, Londres le gana por goleada.

¡Y POR FIN LLEGUÉ A LA PLAZA DEL MERCADO!

Como habéis podido comprobar, me encantó esta plaza. Tengo muchas más fotos de ellas pero no quería abusar tampoco tanto. Al principio cuando llegué estaba nublado [en las primeras fotos se puede ver] pero conforme iba andando y haciendo fotos, el cielo empezó a despejarse dejando imágenes taaaaaaaaan bonitas. Todas las fotos anteriores son de la plaza que, al ser la segunda más grande de Polonia, da para mucho.

Me llamó la atención ese edificio o lo que sea porque me recordó al que hay en el retiro en Madrid.

Y por último, mi mañana acabó con estos deliciosos Pierogi rellenos de carne. Es una comida típica de allí que os recomiendo muy mucho que los probéis, pueden llevar otras cosas pero me decanté por esos. Y llenan una barbaridad...

¿Qué os ha parecido? ¿Os animáis a visitar la ciudad? Si aún no, esperad a la segunda entrada que entonces sí que sí querréis volar hasta allí. Gana puntos que sea una ciudad no muy cara [exceptuando el centro centro], con sitios preciosos, pequeñita, animada y con un tiempo aceptable. Espero que mi siguiente destino sea Edimburgo [cruzad los deditos].

¡Feliz jueves, corazones!